Pierre Lemaitre es un escritor francés reconocido por sus novelas policíacas y de suspenso. Nacido en París en 1951, Lemaitre inició su carrera literaria en 2006 con la publicación de su primera novela, "Irène", que le valió el prestigioso premio Goncourt a la mejor primera novela y lo estableció como uno de los autores contemporáneos más destacados en el género. Lemaitre es conocido por su estilo narrativo ágil y envolvente, así como por sus tramas intrincadas y llenas de giros inesperados. Sus novelas suelen abordar temas oscuros y perturbadores, explorando la psicología de sus personajes y llevando al lector por un viaje emocionante y lleno de suspenso.
Además de "Irène", Lemaitre ha escrito otras obras destacadas como "Alex", "Camille" y "Travail soigné", todas ellas aclamadas por la crítica y el público. Su talento para crear novelas absorbentes y personajes complejos le ha valido numerosos premios literarios y una sólida reputación como uno de los mejores escritores de novela negra de la actualidad.
En resumen, la obra de Pierre Lemaitre destaca por su originalidad, su maestría en la construcción de tramas y su capacidad para mantener al lector en vilo hasta la última página. Con un estilo único y una voz propia, Lemaitre se ha ganado un lugar destacado en la literatura contemporánea, consolidándose como un autor imprescindible para los amantes del género policíaco.
RESEÑA
"Nos vemos allá arriba" es una novela que nos sumerge en la Francia de la posguerra, específicamente en los años posteriores a la Primera Guerra Mundial. La historia sigue a los protagonistas Albert y Édouard, dos soldados que sobreviven a la guerra pero que quedan marcados para siempre por las terribles experiencias vividas en el frente.
La trama gira en torno a una estafa que ambos personajes planean para vengarse de aquellos que los traicionaron durante la guerra. A medida que la historia avanza, nos adentramos en un mundo de corrupción, pasiones desenfrenadas y traiciones, en el que los protagonistas luchan por sobrevivir en un entorno hostil y despiadado.
En un momento determinado de la novela Albert piensa: “Sabía que de todo se recupera uno, pero desde que había ganado la guerra, tenía la sensación de perderla un poco más cada día”.
Con una prosa elegante y cuidada, Lemaitre nos transporta a un período histórico fascinante y nos sumerge en el mundo de posguerra con personajes complejos y profundos. La novela combina el suspenso, la tragedia y el drama de una manera magistral, manteniendo al lector en vilo hasta la última página. Aunque también se comenta que en los últimos capítulos se precipitan los acontecimientos, que el autor resuelve de una manera irreal y muy rebuscada.
Destacar al personaje de Merlín, funcionario encargado de inspeccionar los enterramientos de los caidos en la guerra, un tipo extraño, pero verdaderamente honrado que pone un poco de honestidad entre tanta pillería. De él son estas reflexiones: “La Tierra siempre ha sufrido epidemias y catástrofes y la guerra no es más que una combinación de ambas. Es estremecedora la edad de los muertos. Las catástrofes matan a todo el mundo, las epidemias se ceban con ancianos y niños, pero solo las guerras exterminan a los jóvenes en un número semejante.”
En resumen, pensamos que "Nos vemos allá arriba" es una obra magistral que nos ofrece una visión cruda y realista de las consecuencias de la guerra en la sociedad y en la psique humana. Una novela imprescindible para los amantes de la literatura histórica y del drama psicológico.
Mario Benedetti fue un escritor, poeta y ensayista uruguayo nacido el 14 de septiembre de 1920 en Paso de los Toros y fallecido el 17 de mayo de 2009 en Montevideo. Es considerado como uno de los autores más importantes de la literatura uruguaya y latinoamericana del siglo XX.
Benedetti comenzó su carrera literaria en la década de 1940 y a lo largo de su vida escribió numerosas obras de diversos géneros, entre ellas novelas, cuentos, poesía, ensayos y piezas teatrales. Algunas de sus obras más destacadas incluyen:
"La tregua" (1960): Una de sus novelas más conocidas, que relata la historia de amor de un empleado de 50 años y una mujer recién llegada a su trabajo. "Gracias por el fuego" (1965): Otra novela emblemática de Benedetti que aborda temas como la soledad, la amistad y la resistencia política. "Inventario" (1967): Una recopilación de poemas que representa la poesía comprometida y social de Benedetti. "La borra del café" (1992): Una colección de cuentos que muestra la maestría narrativa y la sensibilidad del autor.
Además de su obra literaria, Mario Benedetti también fue un activista político y defensor de los derechos humanos, participando activamente en la lucha contra las dictaduras militares en Uruguay y en otros países de América Latina.
Benedetti fue un autor prolífico y comprometido que dejó un legado literario importante y que sigue siendo leído y admirado en todo el mundo.
(Palermo,
23 de diciembre de 18961– Roma, 23 de julio de 1957) fue un escritor italiano,
autor de una única novela, El gatopardo, ambientada en la Unificación italiana.
El gatopardismo, o el adjetivo lampedusiano, ha pasado a definir el cinismo con
el que los partidarios del Antiguo Régimen se amoldaron al triunfo inevitable
de la revolución, usándolo en su propio beneficio; posición acuñada en una
frase lapidaria: Que todo cambie para que todo siga igual.
Biografía
Giuseppe
Tomasi, príncipe de Lampedusa y duque de Palma di Montechiaro, nació en
Palermo, hijo del príncipe Giulio Maria Tomasi di Lampedusa, y de la princesa
Beatrice Mastrogiovanni Tasca di Cutò. Su título proviene de la isla de
Lampedusa, el territorio italiano más meridional.
Se
convirtió en hijo único tras la muerte de su hermana de corta edad, Stefania, a
causa de la difteria y se mantuvo muy ligado a su madre, mujer de fuerte
personalidad y que tuvo una gran influencia sobre él. Su relación fue muy
distinta con su padre, hombre de carácter frío y desapegado. Su infancia
transcurrió en los palacios paternos de Palermo y de Santa Margherita di Belice
«por cuyas estancias fue aprendiendo el camino de la soledad y la compañía de
los libros». De niño estudió en el domicilio familiar de Palermo donde fue
educado por una maestra, por su madre, que le enseñó francés, y por su abuela,
que le leía las novelas de Emilio Salgari. En el pequeño teatro de la casa de
Santa Margherita di Belice, donde pasaba largas vacaciones, asistió por primera
vez a una representación de Hamlet a cargo de una compañía de cómicos errantes.
Desde
1911 Tomasi acudió al instituto de secundaria en Roma, y posteriormente en
Palermo, en los que cursó estudios de letras. En 1915 se matriculó en Roma en
la Facultad de Derecho, si bien ese mismo año fue llamado por el ejército,
participó en la derrota de Caporetto y fue hecho prisionero por los austriacos.
Recluido en un campo de concentración húngaro, consiguió fugarse y volvió a pie
a Italia. Abandonó el ejército con el grado de teniente y volvió a la casa de
Sicilia, alternando el descanso con algunos viajes, siempre en compañía de su
madre, que no lo abandonaba nunca, y estudiando literaturas extranjeras.
Durante
una temporada en Londres, conoció a la más tarde célebre psicoanalista de
origen letón Alexandra Wolff Stomersee (Niza, 1895 – Palermo, 1982) con quien
contrajo matrimonio en Riga en 1932. Alexandra, conocida familiarmente como
Licy, era de familia noble y se crio en San Petersburgo, donde su padre era un
alto funcionario en la corte del zar Nicolás II.
Fueron
a vivir con la madre de Giuseppe a Palermo, si bien muy pronto la
incompatibilidad de caracteres entre las dos mujeres hizo a Licy regresar a las
propiedades familiares en Letonia, desde donde, tras la victoria soviética y
confiscados sus bienes, se trasladaría a Roma. En 1934 falleció Giulio Tomasi,
tras lo que Giuseppe heredó el título. En 1940 fue de nuevo llamado a las
armas, si bien fue rápidamente licenciado por hallarse a cargo de la hacienda
agrícola que había heredado. Se refugió entonces con su madre en Capo
d'Orlando, donde acudió también Licy huyendo de los peligros de la guerra. Tras
la muerte de su madre en 1946, Giuseppe volvió a residir en Palermo con su
esposa. En 1953 comenzó a frecuentar un grupo de jóvenes intelectuales al que
pertenecía el joven Gioacchino Lanza, con el que entablará una excelente
relación que le llevaría a adoptarlo algunos años después.
Lampedusa
se alojó con frecuencia en casa de su primo, el poeta Lucio Piccolo de Capo
d'Orlando, con el que acudió en 1954 a San Pellegrino Terme, para asistir a un
premio literario en el que conoció entre otros a Eugenio Montale y a Maria
Bellonci. Se dice que fue a la vuelta de ese viaje cuando comenzó a escribir El
gatopardo, que finalizaría dos años después. Al principio la novela no fue
tenida en consideración por las editoriales (Einaudi y Mondadori) a las que fue
presentada a través de su primo Lucio Piccolo, y estos rechazos, conocidos
pocos días antes de su muerte, causaron amargura en Lampedusa. En mayo de 1957
le es diagnosticado un tumor pulmonar. Su novela no fue publicada hasta un año
después de su muerte, cuando Elena Croce (hija de Benedetto Croce) la envió a
Giorgio Bassani, que la hizo publicar en la editorial Feltrinelli. El año
siguiente, 1959, la novela obtuvo el Premio Strega, el más importante de
narrativa en Italia. En 1960 llevaba ya más de cincuenta ediciones y era el
primer superventas italiano.
Por
otra parte, de Giuseppe Tomasi di Lampedusa se conservó también un conjunto de
relatos, bajo el título general I racconti. El principal de los cuatro que el
volumen reúne, titulado "La sirena" (pero conocido también como
"Lighea" o "El profesor y la sirena"), fue escrito en el
invierno de 1956-1957, meses antes de morir; en él su narrativa es
extraordinaria, mezclando con gran habilidad, en un cuento dentro de otro
cuento, realidad, ficción, mito y cultura.
Falleció
mientras dormía en Roma, donde estaba recibiendo tratamiento. Se celebró por él
un réquiem y su cuerpo fue depositado en una sencilla tumba de mármol rodeada
por una verja de hierro, en el Cementerio de los Capuchinos de Palermo, donde
casualmente había hecho reposar también a su "Príncipe Fabrizio di Salina"
de El gatopardo y sería inhumada su esposa Alessandra, un cuarto de siglo
después.
RESEÑA
¿Cómo fue
posible?
Esta es
la pregunta que se hace Mario Vargas Llosa a lo largo del prólogo de la única
novela del escritor siciliano Giuseppe Tomasi de Lampedusa, el Gatopardo.
La obra
está ambientada en el convulso periodo histórico de la Unificación Italiana. El
principal protagonista es Fabrizio Corbera, gran terrateniente e imponente
príncipe de Salina que contempla el desmoronamiento de la clase aristocrática a
la que pertenece; perezosa, abúlica e inmovilista, destinada inevitablemente a
desaparecer y a ser sustituida por una burguesía inculta, codiciosa y vulgar.
Consciente de este cambio anima a su sobrino a que se case con la hija del
alcalde del pueblo de Donnafugata, quien es el paradigma de esa nueva clase. Es
el momento en que la aristocracia siciliana, rica en tierras pero escasa de
dinero, concierta matrimonios de conveniencia con el nuevo poder, el de los
comerciantes de coloniales, de vinos, de cítricos etc. El sobrino que está
arruinado ve la oportunidad de progresar económica y políticamente y se adapta
rápidamente a las circunstancias. Es precisamente él, en una de las
conversaciones con su tío el que pronuncia la célebre frase “si queremos que todo
siga igual, es necesario que todo cambie.”
Lampedusa
consigue reflejar toda una época de cambios tanto familiares como sociales
mediante las profundas reflexiones de ese orgulloso y a la vez atractivo
príncipe, fiel reflejo de su propio bisabuelo. Es prodigiosa su capacidad para
describir ambientes: decoración y mobiliario de los palacios, los olores de los
jardines y del campo, las copiosas comidas sobre elegantes manteles, el
vestuario o la belleza de las mujeres pero sobre todo las especiales características
de su tierra, la tan criticada pero tan amada Sicilia, su aislamiento, sus
gentes, sus olor, su terrible clima, su paisaje y su maravillosa luz.
Según
los que lo conocieron fue un hombre taciturno y solitario con una vasta
cultura, que en su juventud vivió en diferentes países y que viajó por muchos
más, pero que los últimos treinta años de su vida los pasó leyendo y meditando
en su casa y en los cafés de Palermo, donde de repente, pocos meses antes de
morir escribe una obra maestra.
¿Cómo
fue posible?
Volviendo
al prólogo de Vargas Llosa, dice que esta obra nos enfrenta al misterio de la
genialidad artística. Él le da muchas vueltas, pero en mi opinión, ese misterio
se reduce a tener o no tener capacidad creativa.
No sé
si habrá muchos casos en que un autor haya escrito solamente una obra como es
el caso de Lampedusa y que haya conseguido convertirla en un best-seller, pero
alguno sí que hay, es el caso de Margaret Mitchell, autora de “Lo que el viento
se llevó” y que como él con solo una obra logró pasar a la posteridad narrando
el episodio de “La Guerra de Secesión Americana” y el fin de la esclavitud. Los
dos tienen en común el haber podido reconstruir, partiendo de personajes de
ficción, un periodo histórico real. Ambos se recrean en los detalles y
consiguen unas novelas tremendamente descriptivas. Uno y otro recurren a las
fuentes familiares para documentarse. En el caso de Lampedusa de los archivos
de su antiquísima y aristocrática familia y en el caso de Mitchell de los que
le proporcionó su padre que era el Presidente de la Sociedad De Historia de
Atlanta. Los dos murieron jóvenes y nunca podremos saber si continuarían
escribiendo, instalados en sus vidas rutinarias De Palermo y Atlanta.
¿Cuál
fue el motivo que les impulsó a escribir? ¿Cómo fue posible? Seguirá siendo un
misterio.
Cavilando sobre el tema recordé una de las
rimas de Becquer que pueda dar la explicación.
Del
salón en el ángulo obscuro, de su dueño tal vez olvidada,
Silenciosa
y cubierta de polvo, veíase un arpa.
¡Cuánta
nota! dormía en sus cuerdas,
Como el
pájaro duerme en las ramas,
Esperando
la mano de nieve que sepa arrancarlas.
Ay,
pensé, cuantas veces el genio así duerme en el fondo del alma,
Esperando
que una voz como a Lázaro diga, levántate y anda.
CZESLAW MILOSZ (30 de junio de
1911-Cracovia, 14 de agosto de 2004) fue un poeta, traductor y escritor polaco;
premio Nobel de Literatura de 1980.
Biografía
Su
familia era originaria de Lituania, aunque de lengua, tradición y cultura
polacas. Durante toda su vida se mantuvo muy unido al que consideraba su
territorio histórico: el Gran Ducado de Lituania. Nació en la Gobernación de
Vilna del Imperio ruso separada de Polonia desde 1795. Las independencias de
1918 eliminarían la precaria unión entre ambos territorios y levantarían
fronteras antinaturales que llevarían, con el conflicto de 1939-1945, al
extrañamiento total de lituanos y polacos. En sus memorias, Otra Europa, dice
“Se comprende mal desde el exterior la intensidad de los odios nacionales en la
Europa del Este. Cuanto más tardíamente se despertó el nacionalismo, tanto más
intentó afianzarse con pasión en los tiempos semilegendarios”.
Hijo de
un ingeniero civil, cursó sus estudios superiores de Derecho en Vilna. Miembro
del grupo literario Żagary, debutó como escritor en 1930, publicando en esa
década dos volúmenes de poesía: Tres inviernos y Poema sobre el tiempo
congelado, por el que consiguió una beca para París donde trabó relación con el
que sería una de sus mayores influencias literarias y filosóficas: su familiar
y poeta francés de origen lituano Oscar Venceslas de Lubicz-Milosz. Trabajó en
la Polskie Radio.
Perteneció
a la generación literaria posterior a la de Stanislaw Ignacy Witkiewicz (1885),
Bruno Schulz (1892) y Witold Gombrowicz (1904). Fue de la misma generación que
la compositora Grazyna Bacewiz y los compositores Witold Lutoslawski y Andrzej
Panufnik.
Durante
la II Guerra Mundial, Miłosz permaneció en Varsovia; vio el horror en «la
ciudad más castigada de Europa» (según escribió en El pensamiento cautivo), y
prestó apoyo a los perseguidos por el régimen nazi: ya antes de la guerra se
había enfrentado claramente a los antisemitas, y fue testigo de la aniquilación
del gueto de esa capital.
De la posguerra
al exilio
Trabajó
en el servicio diplomático de la Polonia Popular desde 1945 hasta 1951 en
Washington y en París. En esta última ciudad, en 1951, Miłosz pidió asilo
político, instalándose en Montgeron entre 1951 y 1960, para huir de la
progresiva imposición del llamado Realismo socialista. A partir de entonces
sufrió el destino de los intelectules.